Bardenas Reales

Después de mucho planificar, por fin hemos encontrado una fecha para salir de excursión betetera a las Bardenas.

Tras acercarnos al centro de información de las bardenas y aparcar el coche. Hemos comenzado la preparación para realizar la ruta  btt número 3 vuelta al polígono, aunque nuestra idea era subir a el Rallon pero ahora esta prohibido subir a cualquiera de los cabezos de la zona y no se puede salir de las pistas balizadas. 

Como era nuestra primera experiencia en esta zona, nos hemos conformado con seguir la pista que bordea el campo de tiro. Una vez hemos salido del centro de información lo primero que hemos visto ha sido el mirador cercano al  punto de información desde donde se tiene una panorámica perfecta de toda la zona, viéndose en días claros tal y como indican las dos mesas de orientación desde el Anie en los pirineos hasta el Moncayo situado en el sistema ibérico y que tan bien conoce el tio Jesus. Después de disfrutar de las vistas  habíamos pensado hacer la ruta en sentido horario, pero la presencia de varias coches por la zona de pista hacia Casteldetierra, que levantaban gran cantidad de polvo, nos ha hecho decidirnos por hacerla en sentido antihorario. Con lo cual lo primero que hemos visto ha sido el cuartel militar. En este punto se acaba la carretera y comienza la pista perfectamente señalizada que hemos seguido a lo largo de todo el camino y en el que nos hemos encontrado un montón de 4x4 de franceses. A pesar del polvo que levantaban hemos podido disfrutar de las vistas (la nada para algunos) y del sonido de  los pájaros que teníamos a nuestro alrededor. por suerte hoy no han sobrevolado los cazas la zona, aunque hemos tenido oportunidad de ver los blancos que tienen en el campo de tiro. Antes de terminar la ruta nos hemos dirigido siguiendo la misma ruta  hacia el Paso y nos hemos detenido en la cabaña del cacho, desde donde hemos visto otra panorámica de la zona desde la única altura a la que nos hemos subido. Desde aquí y tras un pequeño  avituallamiento solido y liquido vuelta hacia el Cabezo de Castildetierra, donde nos hemos encontrado con muchos visitantes en bici, coches, autocaravanas y como no andando, haciéndose fotografías ante el símbolo más conocido de las bardenas.
Aquí ya oíamos más de cerca la tormenta que estaba rodeando el parque, pero no pensábamos que en el desierto pudiese llover,  pero si una tormenta de las de impresionar ha caído justo cuando hemos llegado al coche y por suerte no nos hemos mojado.