Descenso Urdaibai

Buen día en lo meteorológico y también en lo deportivo. Éxito de la convocatoria, en la que la mayor parte de la kuadrilla y parte del extranjero estaban dispuesto a realizar el descenso en canoas del Urdaibai y a dar cuenta de una buena comida para recuperar fuerzas. A la hora prevista con puntualidad inglesa, estábamos ya en Laida esperando a que nos diesen instrucciones sobre como vestirnos para la ocasión y en que consistía la actividad. Tras varios viajes para llevar a todos los participantes hasta Arteaga lugar de la salida, montamos en las canoas los 34 canoistas, en todo tipo de embarcaciones tanto individuales como dobles. Salida un poco accidentada para algunos al canal, en el que el ancho no permitia maniobrar como alguno quisiera, pero tras unas cuantas paladas, mas o menos todos cogimos el ritmo y llegamos sin dificultad hasta el molino de mareas (1/3 del recorrido) donde todos nos concentramos. A partir de aquí, como si de una concentración se tratase todos juntitos, hasta la chimenea, donde empezaron las primeras escaramuzas para bañarse y probar el agua. A partir de aquí algunos tuvieron algunos problemas porque empezaba a subir la marea y soplaba el viento en contra, pero nada que no se pudiera resolver con un poco de esfuerzo y de sufrimiento para llegar a la tercera y última parada en la playa. Intento de motín, en el que alguno pensaba dejar la embarcación e irse andando, pero tras un breve descanso y alguna que otra negociación para cambiar de embarcación y de compañero, se inicia el tercer y último tramo hasta el embarcadero donde dejamos las canoas, para goce de algunos y tristeza de otras que hubiesen querido seguir todo el día. Una vez en tierra, cambio de ropa y la destreza de Edu, que negocio muy bien el tema de las viandas en la cervecera hizo que fuese terminar de cambiarnos y sentarnos en la mesa a comer todo lo que nos pusieron en la mesa, nunca ha sobrado tan poco comida en una mesa de cervecera.
Después de los postres, cafés y las copas tertulia hasta que cada uno fue decidiendo marchar para casa. Y cual no sería mi sorpresa cuando llegue a casa y descubrí que no me podía poner los pantalones largos porque no tenia mochila, menos más que por suerte todavía quedaba gente en Laida de tertulia y descubrieron que me había dejado la mochila en el garito de los de UR, menos más porque sino hubiese tenido que hacer otro viaje solo para cogerla la dichosa mochila, aunque igual hubiese sido una buena ocasión para dar otro paseo en canoa.

Bueno pues con esta actividad, damos por finalizado el curso escolar 08-09, el año que viene que tocará? se admiten propuestas.

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